Este proyecto reúne las prácticas de María Sosa Ruíz (México) y Andrea Monroy Palacios (Guatemala), dos artistas que, desde distintos lugares, entretejen memoria, historia y materialidad para cuestionar las formas en que se han configurado nuestras realidades culturales y políticas.

Andrea Monroy Palacios trabaja desde la tradición textil guatemalteca, explorando el tejido y el bordado como escritura manual y como archivo vivo de identidades individuales y colectivas.

Sus piezas convierten al textil en un medio de pensamiento, donde las técnicas y los materiales son parte inseparable del mensaje.

María Sosa, por su parte, indaga en los procesos de la conquista y el contacto entre pueblos originarios y europeos, entendiendo la historia como un material escultórico que puede moldearse para intervenir en el presente. A partir de metodologías que cruzan la antropología, la arqueología y la práctica artística, su obra activa memorias y confronta las huellas coloniales que siguen marcando el mundo contemporáneo.

En conjunto, sus trabajos abren un espacio de resonancia donde la observación histórica y la tradición textil dialogan como formas de resistencia y de relectura crítica del pasado. El gesto de tejer y el acto de excavar se encuentran aquí como prácticas de recuperación y reconfiguración, generando un proyecto que piensa la memoria no como un vestigio fijo, sino como un territorio vivo en permanente transformación.